La calvicie o alopecia androgénica puede deberse a múltiples factores (genéticos, hormonales, etc.) y puede ser de diferentes tipos. Para poder tratarlas eficazmente hay que saber cuál padeces. En el post de hoy hablaremos de la alopecia androgénetica o también conocida como «calvicie común», de qué va esta condición médica, cómo puedes tratarla, cuáles son los síntomas y responderemos si realmente tiene cura o tratamiento.
La alopecia androgénica es un tipo de calvicie que normalmente padecen los hombres, aunque no exclusivamente es un problema de caballeros, porque las mujeres también pueden padecerla.
Qué es y cuál es el origen de la alopecia androgénica
Al igual que la alopecia areata, la alopecia androgénica tiene diferentes causas; puede ser ocasionada por problemas hormonales, por problemas de alimentación, por la falta de ciertos nutrientes, por el estrés, por alergias y más.
Básicamente cuando una persona sufre de alopecia androgénica en el cuerpo; internamente hay aumento de las funciones que cumplen los andrógenos y en ese punto ciertas áreas del cuero cabelludo empiezan afectarse, provocando la disminución de la actividad que deben realizar los folículos pilosos.
Estos últimos se van poniendo más pequeños, cada vez más pequeñas hasta que se obtiene la pérdida de cabello. Cuando se atrofia el bulbo piloso no nace cabello y es lo que ocurre cuando se tiene alopecia androgénica.
Es importante en este particular conocer la causa de la alopecia androgénica; a qué se debe la pérdida del cabello. Esta puede ser genética y/o andrógena y también este tipo de alopecia puede darse en combinación de factores, es decir; puedes estar sufriendo de estrés emocional y adicional un desorden hormonal que da como consecuencia la calvicie.
Siguiendo en la línea anterior también puede haber una alteración en el sistema inmunitario, en las tiroides y más, por lo que es importante consultar con un médico especialista y hacerse todos los chequeos para determinar que los niveles en el cuerpo estén adecuados.
Además, la alopecia androgénica puede deberse a falta de nutrientes; que no comes adecuadamente y no tienes las vitaminas que necesitas, como: la vitamina D, la vitamina A, los carotenos, el hierro y algunos aminoácidos.
Tú puedes estar sufriendo de alopecia androgénica por muchas razones; hasta la menopausia la puede causar, algunos medicamentos, las alergias, también los tratamientos médicos anticancerígenos, la pérdida de peso y sobre todo por la genética.
¿Quiénes pueden sufrir de alopecia androgénica?
La alopecia androgénica es una enfermedad dermatológica que normalmente ataca a los hombres, sin embargo; las mujeres no están exentas.
La estadística comprueba que la alopecia androgénica afecta a un 30% de las mujeres mayores a los 45 años y a los caballeros en un 70%.
¿Cómo luchar contra la alopecia androgénica?
Dependiendo del origen de la alopecia androgénica luchar contra esta puede ser muy sencillo, sin embargo, cuando hay factores genéticos involucrados revertir el proceso de calvicie se puede volver lento y complicado; por lo que optar por la técnica Microfue te ayuda a encarar el problema de manera más positiva y mejorar toda tu apariencia en tan solo una sesión.
Pese a lo anterior también debes cuidar ciertos aspectos de tu cabello y cuero cabelludo para evitar la aparición de la alopecia androgénica.
La alopecia androgénica se esparce sobre el cabello, sobre todo cuando éste no es cuidado adecuadamente; cuando está sucio, cuando se utiliza gelatina para el cabello, geles u otros productos abrasivos. Lo ideal es lavar tu cabello con un producto adecuado y utilizar agua templada.
Además, debes tener mucho cuidado al manipular tu cabello; ser gentil a la hora del secado y del lavado. Masajea tu cuero cabelludo para activar los folículos pilosos y nunca seques con secador, sino permite que tu cabello se seque al aire libre.
Si eres mujer y sufres de alopecia androgénica debes cuidar los peinados que te haces; las coletas muy apretadas, las trenzas y otros peinados que causen mucha tensión sobre tu cabello pues contribuyen a la caída lenta y progresiva del mismo.
La manera de tener a raya la alopecia androgénica es comer adecuadamente, aunque no lo creas «somos lo que comemos» y si tu alimentación falla, todo en tu organismo deja de funcionar correctamente.
Es importante suplir el cuerpo de vitaminas, como: los ácidos grasos omega-3, el azufre, el hierro, el magnesio, las vitaminas del grupo B, vitamina C y más. Todos estos elementos puedes conseguirlo en alimentos, como: la carne, el pollo, el pescado, el salmón, los huevos, los cereales, las legumbres, los frutos secos, el pan integral, la cebolla, el ajo y más.
Si sientes que aún tienes un déficit vitamínico alto, prueba un suplemento de vitaminas y minerales así puedes evitar a toda costa que la enfermedad empeore.
¿Tiene cura la alopecia androgénica?
Cómo con casi todos los tipos de alopecia hay cura, pero es difícil de lograr; puede tardar mucho más tiempo del que desearías.
Básicamente a la persona se le somete a un tratamiento con finasteride, minoxidil, lociones, champú anticaída y vitaminas. Sin embargo, el problema puede seguir; ya que puede ocurrir que el mismo organismo haya dañado los folículos pilosos y ya no pueda volver a crecer cabello en ellos.
Pese a lo anterior hay opciones de avanzada, como: Microfue, que es excelente, que te permiten implantar cabellos en cualquier zona de tu cabeza en tan sólo una sesión y los resultados son increíbles; las personas no sabrán que sufriste de alopecia.
Cómo tratar la alopecia androgénica
Muchos piensan que la alopecia es una condición médica nada grave; ya que no ocasiona ningún tipo de consecuencia en el organismo, pero si hay consecuencias psicológicas para quien padece la alopecia.
La persona se siente mal, sufre de baja de autoestima; no le gusta su apariencia y se esconden con gorras o sombreros que al final dañan más su cabello.
Es importante por el bienestar de la persona que está sufriendo de la calvicie buscar un tratamiento efectivo y rápido que le dé soluciones.
Por lo que son muy recomendado los implantes de cabello, bajo la técnica FUE. Este procedimiento no deja cicatrices y, lo mejor: permite que la persona vea resultados desde el primer día y adicional, puedes acompañarlo con el tratamiento dermatológico indicado para que los resultados sean extremadamente positivos.
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