Vitaminas que previenen y detienen la caída del cabello

Estamos habituados a oír que para mejorar la salud de nuestro cabello y, por ende, para prevenir su caída, debemos consumir vitaminas. Sin embargo, es normal que nos preguntemos si las trece vitaminas que existen son beneficiosas para este propósito.

La respuesta es que no.

Algunas de ellas resultan de vital importancia para prevenir la caída del cabello y evitar los trasplantes capilares antes de tiempo, mientras que otras no tienen ningún efecto sobre nuestra salud capilar.

Incluso alguna de ellas, como es el caso de la vitamina A, tomada en exceso favorece la caída capilar, pero por otro lado resulta esencial ingerirla para prevenir este mal.

vitaminas y alimentos saludables para el pelo

Vitaminas que fortalecen el cabello y evitan su caída para no necesitar un trasplante capilar

Antes de recurrir a un injerto capilar, siempre recomendamos intentar los diversos métodos que revierten la caída del cabello. Entre los más importantes están los relacionados con la alimentación o la ingesta de vitaminas.

En el caso de que nada pueda frenar una incipiente alopecia, no hay nada de qué preocuparse, ya que los trasplantes capilares han avanzado de forma sorprendente, por lo que resultan fáciles y seguros de llevar a cabo.

Además de ello, todas estas recomendaciones alimenticias son muy útiles para después de cualquier tratamiento de trasplante capilar o de injerto capilar, ya que en dichos tratamientos se utiliza el cabello del mismo paciente, así que también hay que alimentarlo y mantenerlo saludable con métodos lo más naturales posibles.

Vitamina A

Al tratarse de un antioxidante, hace que el cabello mantenga la apariencia joven y esté siempre resplandeciente, aunque su exceso puede ser contraproducente. Cuando la fibra está sana, no se cae sino hasta haber cumplido su ciclo vital.

Alimentos que la incluyen: está presente en el hígado de vaca, ternera y cerdo, en las zanahorias, espinacas, boniatos, tomate, mantequilla, leche, nata, quesos curados, almejas, congrio, anguila, melón, damascos y mango.

Vitamina B5

Su acción es la de activar el folículo capilar para que se regenere. De esta forma, el cabello lucirá abundante y sano, ya que su crecimiento será permanente.

Alimentos que la incluyen: puedes beneficiarte de ella en los mariscos, el pescado, el pollo, los huevos, el brócoli, el yogur, el aguacate, los boniatos, los champiñones, el hígado y en la levadura.

Vitamina C

Protege al cabello de las agresiones del ambiente y favorece su regeneración ante la caída diaria normal.

Alimentos que la incluyen: puedes encontrarla en el melón cantalupo, en el kiwi, en el mango, en la papaya, en los frutos rojos, en la sandía y en todos los cítricos.

Vitamina H

También conocida como biotina, la vitamina H se ha vuelto muy popular debido a la gran cantidad de cosméticos capilares que la incluyen. Además de evitar la caída, engrosa la cutícula capilar, por lo que brinda un aspecto joven y vital al cabello.

Alimentos que la incluyen: se encuentra en el hígado de vaca y de cerdo, en el plátano, el tomate, el arenque, las fresas, el huevo, la leche entera y las legumbres.

Síntomas que indican que puedes estar desarrollando alopecia

Solo en contados casos la alopecia comienza de un día para el otro. Este es un proceso degenerativo que absorbe la causa, la procesa y la comienza a manifestar tiempo después o de manera muy paulatina.

Lamentablemente, la prisa cotidiana nos lleva a olvidarnos de prestarle atención a algo tan importante como las pequeñas alertas que nuestro cabello manifiesta.

El resultado de la negligencia desemboca en dos posibles opciones: los trasplantes capilares o el injerto capilar.

Aún te encuentras a tiempo de observar esos sutiles cambios que podrían derivar en la calvicie, los cuales son los siguientes:

Cabello opaco: la falta de brillo es una de las señales de mala nutrición. Cuando el cabello recibe todos los nutrientes que necesita, lo primero que salta a la vista es que se encuentra reluciente, dócil y fuerte.
Cabello quebradizo: cuando este síntoma se hace presente, es señal de que el cabello ha estado sufriendo daños severos. Lo primero que debemos hacer es detectar la causa de este mal, la cual puede oscilar entre una decoloración muy fuerte, el uso constante de tintes y de la plancha de pelo, y la exposición constante al calor artificial.
Caspa: la caspa es una manifestación de que algo no está bien con nuestro cuero cabelludo. Una de las principales causas de la necesidad de llevar a cabo los trasplantes capilares es la de padecer de un cuero cabelludo maltratado o enfermo. En tal caso, debemos identificar el producto que nos está causando esta reacción, así como también espaciar la frecuencia del lavado capilar.

Si al cambiar y mejorar nuestros hábitos, el problema persiste, este puede deberse a la edad o a la genética. Ninguno de estos factores puede ser solucionado a través de la alimentación o de cuidados específicos del cabello. En tales casos, se recomienda hacer una consulta para identificar el mejor tratamiento para nuestro caso, el cual puede ser un trasplante capilar o un injerto capilar.

Productos que previenen la caída del cabello

Existen tónicos muy avanzados para brindar salud y fuerza a nuestro cabello. Entre todos ellos destaca, sin duda alguna, DensityPlus, un complejo multi-vitamínico capilar que fomenta el crecimiento del cabello, reestructurándolo y consiguiendo que crezca más vigoroso y con mayor grosor, lo que lo hará más fuerte y resistente a la caída.

Density Plus se formuló especialmente para ser empleado tras el trasplante capilar, sin embargo, podrá ser empleado por todos aquellos que quieran conseguir mayor densidad, mejorar su salud capilar y evitar que el cabello se caiga.

Density Plus contiene nutrientes que no encontrarás en ningún otro suplemento, algunos tan interesantes como frutos de Saw Palmetto (serenoa repens) un componente natural que bloquea la enzima 5 alfa-reductasa, una de las responsables de la alopecia androgénica y disminuye los niveles de DHT, principal causa de la caída del cabello. Este compuesto ha sido utilizado durante siglos por los indios americanos para tratar problemas del tracto genitourinario, atrofia de los testículos e impotencia.

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